4.2. Seguridad y mantenimiento

Una vez que tenemos instalado todo nuestro estudio con el ordenador en pleno rendimiento, sería una lástima que todo se viniese abajo por un virus informático o un fallo técnico. Por lo que pueden ser importantes estos consejos:

  • Hacer copias de seguridad. Hoy en día gracias a los discos duros externos es fácil ir realizando, con regularidad, copias de seguridad de todos los archivos del ordenador. Y para facilitar esta labor, existen programas que nos permiten ir realizando solamente la copia de aquellos archivos que hayamos modificado desde la última copia de seguridad realizada, lo que agiliza mucho el proceso.
  • Protección para Internet. No puede faltar un buen antivirus, que actualicemos constantemente, y la sana costumbre de analizar con el antivirus archivos que descarguemos o que traigamos en CD-ROM, DVD, memorias USB, etc. Para controlar los accesos a nuestro ordenador, nada mejor que un cortafuegos (firewall).
  • Espacios reservados. Sin llegar a utilizar ordenadores distintos, sí podemos, por lo menos, utilizar un espacio específico en nuestro disco duro (partición) para guardar los archivos audio, es decir, crear espacios independientes y que los problemas que surjan en uno de ellos no afecten directamente a los demás (aunque no deja de ser el mismo disco duro y, por lo tanto, siempre sería mejor disponer de un disco duro externo para las copias de seguridad).

Además de estas cuestiones de seguridad, habría que tener algunos cuidados con el mantenimiento de nuestro equipo:

  • Desfragmentar el disco duro. Es decir, juntar todos los trozos de un mismo archivo, que pueden haberse grabado en distintas zonas del disco duro. Así las labores de lectura y grabación son mucho más ágiles, puesto que, cuando se está usando dicho archivo, no gasta tanto tiempo leyendo sus datos dispersos por el disco.
  • Actualizar los controladores. Porque eso podría evitar algún conflicto que se esté produciendo en nuestro sistema.
  • Actualizar el sistema operativo y el software. Las actualizaciones del sistema operativo pueden corregir defectos que nos estén perjudicando o nos pudiesen perjudicar. Las actualizaciones de las aplicaciones informáticas, que estemos utilizando, pueden corregir defectos o errores de programación (los denominados bugs) que pueden ser los causantes de ese comportamiento extraño del programa, al realizar alguna acción concreta.