Búsquedas eficientes
Buscar con eficiencia en Google
Uno de los problemas que manifiestan la mayoría de los usuarios cuando se inician en las búsquedas de información es que no consiguen encontrar respuestas adecuadas, bien porque obtienen demasiados resultados o bien porque los que obtienen no tienen demasiado que ver con lo que estaban buscando.
El paso del tiempo ha hecho que las tecnologías de los buscadores se hayan ido depurando y se vayan afinando cada vez más los resultados, pero un elemento que sigue siendo clave para obtener la información eficientemente es la pericia de quien hace la consulta. Si se tiene claro a quién estamos interrogando y cómo responde a nuestra pregunta conseguiremos mejorar sensiblemente la eficiencia de nuestras búsquedas, esto es, lograremos rápidamente una cantidad manejable de información relevante.
Podríamos hacer un símil entre las bases de datos de un buscador y una inmensa biblioteca. La pantalla por la que accedemos al buscador cumpliría las funciones de un eficiente bibliotecario, lo cual nos viene muy bien para recordar que un bibliotecario no tiene por qué conocer el contenido de todos los libros que hay en la biblioteca; más aún, conociendo bien los mecanismos de catalogación de la misma no tendría por qué conocer el contenido de ninguno y ser igualmente eficiente en el desempeño de su trabajo de localizar lo que le solicitamos. Además hay un dato que no debemos perder de vista en el que el paralelismo entre el bibliotecario virtual y el real se separaría: mientras que un bibliotecario real puede interpretar lo que lee y discernir si una determinada palabra puede pertenecer o no a un campo de ideas, el bibliotecario virtual no entiende, sencillamente acumula palabras en su base de datos sin atribuirles sentido.
Empezando pues por lo más simple pensemos en que le pedimos a nuestro bibliotecario que nos proporcione los libros o artículos de educación. Posiblemente su mirada estaría cargada de reproche por ser tan poco específicos en nuestra consulta pero nos traería un ingente montón de documentos. En el caso del bibliotecario virtual el resultado final sería el mismo, aunque ahorrándonos la mirada de reproche.
La consulta más simple
La consulta más simple consiste en teclear una única palabra en la caja de texto del buscador y pulsar el botón de búsqueda o la tecla Intro. Como puedes ver en las siguientes imágenes da prácticamente igual el buscador que utilicemos.
Búsqueda en Altavista (http://es.altavista.com) | Búsqueda en Google (http://www.google.es) |
Búsqueda en Bing (MSN) (http://www.bing.com) | Búsqueda en Yahoo! (http://es.yahoo.com) |
El inconveniente de esta consulta tan simple es que el número de resultados obtenidos va a ser excesivo porque es muy poco específica. El motivo de esta respuesta masiva es que los buscadores consultan su base de datos y nos devuelven todas aquellas páginas en las que aparece la palabra educación.
Afinando la consulta
Para acotar nuestra búsqueda podemos añadir una segunda palabra y buscar educación secundaria. Cuando añadimos una nueva palabra a una búsqueda todos los buscadores interpretan que deben ofrecer como resultados aquellas páginas en las que figuren ambas palabras. En términos lógicos interpretarían la consulta como "páginas en las que aparezca la palabra educación Y la palabra secundaria", lo cual va a reducir el número de resultados válidos, puesto que aquellas que incluyan la palabra educación pero no la palabra segundaria no cumplirán la condición.
Como es de esperar cuantas más palabras incluyamos nuestra búsqueda se irá acotando y ofreciéndonos resultados más acordes con lo que realmente estamos buscando.
No olvidemos que cuando añadimos palabras a nuestra búsqueda nuestro pensamiento está intentando acotar un campo de contenidos, pero los buscadores se limitan a comprobar si esas palabras existen en el texto, sin preocuparse de que estén relacionadas entre sí. Si recordamos la comparación original, un bibliotecario real podría discernir si un determinado artículo se ajusta al campo de significados que estamos intentando localizar, mientras que el bibliotecario virtual simplemente comprobaría la existencia de los términos buscados, independientemente de que uno aparezca separado del otro y sin ninguna relación conceptual.
La adición de palabras a una consulta tiene un límite en Google, puesto que sólo considerará las diez primeras que se introduzcan en la caja de texto.
Busca en Google la expresión Educación Secundaria y comprueba la cantidad de resultados obtenidos.
¿Términos superfluos?
Si consultamos la ayuda de Google veremos que nos informa de que "Google ignora las palabras y caracteres comunes, conocidos como términos superfluos. Google automáticamente descarta términos como "http" y".com,", así como ciertos dígitos o letras, porque raramente estos términos ayudan a acotar la búsqueda y pueden demorarla en forma significativa."
Realiza una búsqueda en Google utilizando la expresión: educación en valores.
Comprueba en la barra de estadísticas el número de resultados obtenidos.
Observa cuáles son las palabras resaltadas en las páginas obtenidas como resultados.
Eñes, tildes y mayúsculas
Aunque hasta el momento las pantallas que se han mostrado incluían la grafía adecuada cuando alguna de las palabras consultadas llevaba una tilde hay que tener en cuenta una particularidad: para Google las tildes, diéresis, eñes y mayúsculas no son significativas. Eso quiere decir que nos mostrará las mismas páginas tanto si buscamos por Martin como si lo hacemos por Martín.
Lo que sí parece que funciona de forma previsible es que si deseamos que nuestra búsqueda se ajuste exactamente a la forma con o sin tilde, eñe o diéresis hay que preceder la consulta con un signo +, sin dejar ningún espacio.
Comprueba en Google si el número de resultados es igual al buscar Martin o Martín y si, al menos los primeros resultados coinciden.
¿Qué te parece si hacemos la comprobación con otro apellido tan castizo como López y la forma incorrecta sin tilde Lopez? ¿Vuelve a repetirse la situación?
¿Y si buscamos López y lópez?
Frases exactas
Hay una forma de acotar las búsquedas que resulta muy efectiva: exigirle al buscador que nos devuelva como resultado páginas que contengan una frase exacta. Para conseguirlo hay que entrecomillar la frase.
Las expresiones entrecomilladas pueden combinarse con otras palabras sueltas para formar cadenas de búsqueda de la forma habitual. En estos casos, la expresión entrecomillada cuenta como una única palabra, independientemente de las que contenga en su interior.
Busca la expresión subir a la montaña sin entrecomillar los términos. Comprueba que Google no resalta las partículas "a" y " la" en muchos de los resultados ofrecidos.
Comprueba también que se nos muestran como resultado de la consulta páginas en las que las palabras subir y montaña aparecen, en bastantes ocasiones, mucho más distanciadas de lo que lo están en la frase que hemos tecleado al buscar.
Busca la expresión "subir a la montaña", entrecomillando los términos. Comprueba como en este caso las partículas "a" y "la" aparecen resaltadas en los resultados de la búsqueda y que, en todos los resultados figura exactamente la frase buscada. Por otra parte, como era de esperar el número de resultados obtenidos es mucho menor que en el caso anterior. Fíjate en el dato del número de resultados.
Los comodines
En ocasiones no queremos limitar la búsqueda a una frase exacta y consideramos que pueden expresiones que contengan determinadas palabras pueden ajustarse a nuestra búsqueda, sin que sea imprescindible que las palabras intermedias sean siempre las mismas, aunque sí en la misma cantidad.
El asterisco funciona como comodín.
La cantidad de asteriscos será la que limite la búsqueda para seleccionar expresiones en las que existan tantas palabras intermedias como comodines hayamos incluido en la búsqueda. Lo mejor será que lo compruebes mediante la siguiente práctica.
Haz una búsqueda de la expresión: "subir * * montaña"
¿Qué diferencias y qué similitudes has encontrado con respecto a la búsqueda anterior de "subir a la montaña"?
El número de resultados obtenidos es ¿mayor, igual o menor que en la práctica anterior?
Excluir términos
En ocasiones necesitamos excluir de nuestros resultados aquellas páginas que contengan determinadas palabras. Para hacerlo precederemos la palabra que deseamos excluir con un signo menos, sin dejar espacio entre el signo y la palabra. Este indicador de exclusión afecta sólo a la palabra que le sucede inmediatamente, por lo que si queremos excluir varios términos deberemos preceder cada uno de ellos con su correspondiente signo menos.
Buscar en Google España las páginas situadas en España que recojan información sobre "directores de cine" pero que no mencionen el género fantástico.
Aceptar páginas con cualquier término
Ya hemos visto que la forma habitual en la que Google concatena los términos que introducimos en la caja de búsqueda es mediante la operación "Y lógico", motivo por el que cuantas más palabras ponemos obtenemos menos resultados. Sin embargo, en algunas ocasiones podemos encontrarnos con que necesitemos obtener como resultados válidos páginas que recojan bien un término, bien otro término diferente o bien ambos conjuntamente.
Por ejemplo: si se están estudiando las figuras cónicas puede interesarnos localizar información sobre las elipses o sobre las hipérbolas. Dado que es probable que haya páginas que aborden sólo un tipo de figuras le indicamos al buscador que deseamos que otorgue validez a los resultados en los que aparezca la palabra elipse, la palabra hipérbola o ambas. Para hacerlo unimos ambas palabras con la partícula OR (ó lógico) o bien utilizando el símbolo | (obtenido al pulsar simultáneamente la tecla AltGr. y el número 1).
Podemos explicar los operadores lógicos "Y" y "OR" de forma gráfica con la representación del siguiente ejemplo de los resultados de una consulta sobre páginas que hablen de la Cordillera Cantábrica y de Sierra Morena u otra consulta que mencionen la Cordillera Cantábrica o Sierra Morena, de la siguiente forma:
Crea una consulta para encontrar páginas que hablen de la Cordillera Cantábrica y de Sierra Morena. Fíjate en la cantidad de resultados.
Ahora crea una consulta que localice páginas que mencionen la Cordillera Cantábrica o Sierra Morena y compara la cantidad de resultados obtenidos.
¿Cuál es el significado de Google?
Por cierto, después de tanto trabajar con este buscador.
¿Serías capaz de diseñar una consulta para averiguar cuál es el significado de Google?
¿Cómo se llamaba el personaje que acuñó el término que se utilizó para obtener este nombre?