2.2. Muestreo

Los samplers o muestreadores trabajan a partir de grabaciones de muestras de sonidos reales. Es decir, realizan capturas de sonidos en formato digital a partir de una determinada fuente de sonido (CD, micrófono, radio, TV, casete, vídeo, etc.), permitiendo luego su edición. Pueden además reproducirse mediante el control desde un teclado MIDI o desde un secuenciador. Así, por ejemplo, si pulsamos un tecla, sonará la muestra grabada y, si la soltamos, dejará de sonar. También, si así lo establecemos, cuando mantengamos pulsada la tecla, puede crearse un bucle que haga que la muestra se reproduzca una y otra vez (aunque en función del tipo de muestra y de si está adecuadamente editada para ello, los resultados serán más o menos satisfactorios).

La asignación de la muestra a cada tecla (mapeo) puede hacerse en los samplers actuales de modo automático. Así, una muestra podemos conseguir que suene con distintas frecuencias, según la nota que corresponda a cada tecla. En sus comienzos, para conseguir esto, los samplers se limitaban a reproducir la muestra a mayor o menor velocidad, para conseguir las notas cada vez más agudas o cada vez más graves, respectivamente. Esto permitía que se consumiese muy poca memoria, pues con una única muestra podían realizarse todas las notas. Pero, por contra, los sonidos cada vez se hacían menos naturales y reconocibles con respecto a la muestra original y, además, no existía un control adecuado para poder conseguir las duraciones de las notas: en las notas más agudas se reducía su longitud, al realizarse cada vez más rápido y en las notas graves se producía el efecto contrario. Con el tiempo esto fue mejorando y pudieron mapearse los teclados a partir de varias muestras y no de una sola (hasta llegar hoy en día a varias muestras para cada nota). Pero el gran avance para la utilización de las muestras lo supusieron las funciones de pitchshifting y timestretching.

El pitchshifting consiste en cambiar el tono o frecuencia de una muestra sin alterar su duración y el timestretching en cambiar su velocidad (duración) sin alterar su tono o frecuencia. Esto se lleva a cabo mediante complicados algoritmos. Además de su importante aplicación a la edición de muestras, también surgieron otros programas que aprovechan, por ejemplo, el efecto de pitchshifting para corregir la afinación de la tomas de voz. Se trata de Autotune, que permite cambiar el tono de una voz o instrumento en tiempo real.

Los samplers incluyen también herramientas que permiten la edición de las muestras, en especial los samplers software, que pueden estar dotados de muchas funciones. Esta edición pasa por modificar su longitud o su altura, por trocearlos en fragmentos que puedan utilizarse independientemente, por aplicarles efectos, etc. Además se busca que éstos puedan ser reproducidos de modo cíclico mediante lo que se denominan loops (bucles), con lo que una muestra puede extenderse así el tiempo que se considere necesario. Para la edición de las muestras pueden emplearse programas de edición de audio o específicos para editar muestras. Para sacar partido a los samples, hay que saber editarlos, organizarlos y mezclarlos para que encajen bien unos con otros. Por eso es importante saber a qué velocidad o frecuencia se han grabado y, en caso necesario, aplicar los efectos de pitchshifting y timestretching antes comentados. Hay programas que permiten automatizar estos procesos permitiendo que todo sea mucho más fácil e intuitivo al trabajar con loops.

Al igual que hemos comentado en otros apartados del curso, el software está ganando terreno al hardware. El software permite mucho más espacio para almacenar muestras en los discos duros, una mejor organización de las mismas, más fácil edición a través de la pantalla del ordenador, etc. La cantidad de samples que será posible utilizar, dependerá de la potencia del ordenador y del tamaño de las muestras.

Realizar muestras de mucha calidad requiere equipos caros y estudios profesionales, cuando se pretende, por ejemplo, muestrear un instrumento acústico. Este motivo, más el tiempo que puede requerir generar y editar muestras propias, hace que en muchas ocasiones se recurra a los presets que incluyen muchos samplers y/o a los samples comerciales que pueden adquirirse en CD o descargarse de Internet (donde también pueden encontrarse muestras gratuitas).

En la extracción de muestras hay que tener mucho cuidado con los derechos de autor. Si se van a tomar fragmentos de grabaciones, hay que obtener previamente los permisos correspondientes, si no se quieren tener problemas legales. Cada compañía discográfica puede tener su propia política al respecto. Y ante cualquier duda, lo mejor es consultar a entidades como la SGAE (Sociedad General de Autores de España). Igualmente, en las descargas gratuitas de Internet hay que asegurarse de si los samples están libres de derechos o si solo pueden utilizarse a nivel personal.